La presente es una carta donde describo de manera explícita lo que está sucediendo con mi deuda. De ninguna manera me reuso a pagar, sin embargo en este momento me encuentro en circunstancias que evitan que lo pueda hacer porque el bienestar de mi familia está primero, alimentos y medicinas son básicos para ello.
Mi comportamiento crediticio puede revisarse para comprobar que tengo un buen historial. Yo sé que para un banco como Santander mi deuda es sólo un pellizco, pero también sé que cada centavo les hace ser quién son. Para mi familia y para mí esta deuda es un tremendo sacrificio que hasta el día de hoy hemos procurado cumplir. Solicite la reestructuración de las últimas tarjetas de crédito que me quedaban, con la firme convicción e intención de finiquitarlas, cabe mencionar que todo mi historia crediticio lo tengo con Santander, yo confiaba en mi banco.
Sin embargo, en vez de resultar una manera de pagar más rápido y solventar la deuda, el aumento de interés fue demasiado y finalmente la cuota que ahora se me maneja como fija es demasiado alta para lo que puedo pagar. Hasta el día de hoy no he encontrado un trabajo por lo que no tengo la fluidez para cubrir la cantidad que debo pagar cada 15 días. No puedo acceder ni a mi cuentas por teléfono ni por Internet me tienen bloqueada, tampoco recibo estados de cuenta, las tarjetas físicas no están conmigo pues me robaron la cartera.
La última vez tuve una confusión entra las tarjetas y pague la que no era, inmediatamente me localizaron y en el momento que me enteré la pagué. En la siguiente ocasión decidí llamar antes para corroborar que no me estuviera equivocando de tarjeta. La persona que atendió mi llamada me sorprendió diciendo que yo no estaba pagando el monto adecuado. Yo le comenté que su compañero me había dado esa cantidad y que yo sólo estoy haciendo lo que ustedes me dicen.
La mujer sólo dijo que reportaría a su compañero y que ni modo yo tenía que apechugara la situación. Lo cuál me parece tremendamente injusto, el error no ha sido mío sino de la otra persona que me dio la información errónea, de aquella persona yo tenía los datos. Entonces le pedí a la mujer que me atendía su nombre y si podía darme un folio de seguimiento para futuras aclaraciones. Ella se puso agresiva, dijo que no había folios para esto y no quiso repetirme su nombre, en ese instante ella empezó a elevar la voz. Yo le pedí que no me gritara y ella elevó más la voz, entonces yo la levante para que ella reaccionara y sólo atino a colgarme.
Yo anote toda la información que me dio sobre el pago de mis tarjetas, pero su nombre no y tampoco me lo quiso dar, después de que me colgara y que me hizo sentir la persona más estúpida con el llanto atravesado, pensé ¿cómo es posible que sin esconderme, que si estoy tratando de pagar en tiempo y forma, que además sin estar de acuerdo con el infinito interés que se me está cobrando procuro cubrir la cuota que se me informó, que estoy sacrificando a mi propia familia con tal de pagar esa deuda y no merezco ni siquiera un trato digno?
Sin casi poder respirar volví a marcar al lada 800 para solicitar la aclaración de mi situación, sin embargo la cuota que me están manejando como pago fijo ahora es demasiado alto, ellos dicen que es la cantidad que yo solicité pero finalmente no soy yo quién llenó esa solicitud sino los asesores telefónicos, en este momento lamentablemente estoy desempleada, soy madre de familia y no puedo anteponer esto a las necesidades de alimentación y salud de mi hijo.
Por lo tanto, me declaro en bancarrota y sin la solvencia para pagar la deuda, no me reuso a pagar porque lo haré cuando pueda pero por el momento es imposible y no lo haré. También reniego de los tremendos intereses que se están cobrando y expreso mi desacuerdo total y absoluto con ello. Pagaré cuando pueda hacerlo y no me estoy escondiendo de nadie.