Alertan sobre este mecanismo de ahorro; se trata de que cada participante invite a otros y éstos a otros más para invertir en un negocio determinado
EL UNIVERSAL
MIÉRCOLES 02 DE SEPTIEMBRE DE 2009
La pirámide es un mecanismo que promueve que cada persona participante invite al menos a dos conocidos a invertir en un negocio determinado y cada uno de ellos a su vez involucre a otras dos personas y así sucesivamente.
Esto es un gran fraude en el que se prometen altos rendimientos a los participantes y, al final, únicamente los promotores de arriba de la pirámide son los que disponen de los recursos de los demás involucrados. Hay distintos tipos de pirámides:
Pirámides abiertas:
Los participantes conocen la estructura del negocio y como tales no deberían darse por engañados; sin embargo, funcionan porque muchos participantes no son informados ni entienden el concepto de saturación, o porque apuestan a estar lo suficientemente altos en la pirámide como para recibir beneficios antes de la saturación.
Pirámides cerradas:
Una persona o empresa funciona como dueño de la pirámide, pero se presenta como un mediador de inversiones. Así, el dueño de la pirámide recibe aportes de los participantes, que promete invertir y al cabo de un tiempo devolver la inversión inicial con muy altos intereses; sin embargo, no existen tales inversiones sino que se utilizan los aportes de los participantes tardíos para devolver los aportes y sumar el interés a los primeros participantes.
Características de la Operación
Los esquemas Ponzi (llamados así porque fueron perfeccionados a inicios del siglo pasado por el estafador Carlo Ponzi) ofrecen a sus inversionistas grandes cantidades de beneficios en un corto periodo de tiempo.
Las características típicas son:
Promesa de altos beneficios a corto plazo.
Obtención de beneficios financieros que no están bien documentados.
Se dirige a un público no financieramente responsable.
Se relaciona con un único promotor o una única empresa.
El riesgo de inversión es muy alto.
En muchos países esta práctica es un delito, ya que para todos los efectos resulta en un fraude.
Entre las causas que propician o facilitan que una persona caiga víctima del fraude y llegue a perder todos sus ahorros, podemos mencionar:
Deseo de obtener grandes ganancias en poco tiempo,
Desinformación,
Falta de Educación Financiera
No hay una fórmula mágica que garantice el éxito absoluto en las inversiones. Todos cometemos errores que a veces pueden ser evitados fácilmente. La inexperiencia, falta de información y decisiones tomadas a la ligera pueden condenar nuestro ahorro y patrimonio a la extinción. Si tiene alguna duda, mejor pregunte.
Condusef sugiere, antes de tomar una decisión, asesorarse en una institución financiera, que en México esté regulada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y supervisada por la CNBV, o adicionalmente en una Casa de Bolsa, Sociedad de Inversión o Unión de Crédito, que operan al amparo de la Ley del Mercado de Valores, la Ley de Sociedades de Inversión y la Ley de Uniones de Crédito, respectivamente.
A mediados de los 90's, con una banca recién privatizada, los instrumentos tradicionales otorgaban tasas del 50% anualizado, en ocasiones inferior al índice de inflación, que para diciembre de 1995 representaba el 51.96%, y menor a la tasa líder, algo similar a lo que sucedió en crisis pasadas.
Así, es importante conocer primero las perspectivas y uso que se dará a los recursos, es decir, si será ahorro, esto es con miras a guardar el dinero en un lugar seguro y tener disposición inmediata, o si deseamos obtener ganancias por el dinero que vamos guardando. Si lo que deseamos es obtener ganancias, entonces debemos invertir, y para ello será adecuado conocer las sociedades de inversión y opciones de mesa de dinero que ofrecen los bancos.