Temor a gripe porcina ha multiplicado pedidos gubernamentales de antiviral
Los pedidos gubernamentales del antiviral Tamiflu, utilizado en el tratamiento del nuevo virus de la gripe porcina en humanos, se han multiplicado desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzara la alerta del potencial pandémico de esta enfermedad.
La farmacéutica suiza Roche, con sede en Basilea, señaló hoy que ha entregado pedidos de Tamiflu hechos por distintos gobiernos para un total de 220 millones de tratamientos.
Se estima que entre 85 y 90 países del mundo cuentan con reservas.
Sin embargo, la compañía declinó identificar a los países a los que ha suministrado el medicamento, así como a aquellos que le han contactado más recientemente para establecer reservas propias o aumentarlas.
"Esta es información confidencial", respondió un portavoz de la compañía a Efe.
En cambio, Roche indicó que cuenta con una red global con capacidad de producir anualmente hasta 400 millones de tratamientos en plantas de Estados Unidos y Europa, aunque en el primero sólo se pueden elaborar 80 millones de tratamientos por año.
La capacidad de producción del antiviral se elevó significativamente tras la aparición del síndrome respiratorio agudo (SARS) en Asia en 2003, cuando la capacidad de producción llegó a 55 millones de tratamientos, frente a 5,5 millones entre 1999 y 2002.
Cuando tres años más tarde surgió la gripe aviar, la capacidad se multiplicó varias veces debido a la decisión de varios países, particularmente de aquellos de altos ingresos, de crear reservas dentro de sus territorios para enfrentarse a una posible pandemia.
Esas emergencias sanitarias revelaron la incapacidad de los países pobres de aprovisionarse de grandes cantidades de medicamentos de marca por su elevado precio.
Roche consintió entonces autorizar a farmacéuticas del mundo en desarrollo a manufacturar la versión genérica del Tamiflu, conocida generalmente como Oseltamivir o Fluvir, un acuerdo que "todavía es válido", según confirmó la compañía a Efe.
Farmacéuticas en China e India han asegurado que podrían aumentar rápidamente su producción de Oseltamivir si la gripe porcina les amenaza a ellos o a otros países en desarrollo.
Sin embargo, éste no es el único antiviral eficaz contra la gripe porcina, pues también está el Zanamivir, comercializado bajo el nombre de Relenza por la farmacéutica Glaxo-Smith-Kline.
De hecho, se cree que Relenza puede ser más eficaz por cuanto se inhala, aunque es más difícil de almacenar que las pastillas de Tamiflu.
Pero ni Oseltamivir ni Zanamivir fueron desarrolladas por sus actuales productores, que compraron los derechos a los inventores, la estadounidense Gilead y la australiana Biota Holdings, respectivamente, las que reciben regalías por sus fórmulas.
Gilead -que tuvo como presidente al ex secretario de Defensa de EEUU, Ronald Rumsfeld, entre 1997 y 2001, tras lo cual se mantuvo como accionista- descubrió la molécula del Oseltamivir a mediados de los noventa y, posteriormente, vendió los derechos de propiedad intelectual a Roche.
El virus A/H1N1, responsable del actual brote de gripe porcina, es de un nuevo tipo, diferente del de la gripe estacional H1N1 y ha mostrado ser sensible al antiviral Oseltamivir (Tamiflu, en su nombre de marca).
Este fármaco actúa inhibiendo la acción de una enzima del virus, responsable de su diseminación dentro del organismo y la consiguiente infección de nuevas células, según información de la farmacéutica Roche.
El tratamiento debe iniciarse en las primeras 48 horas de la aparición de los síntomas, pues cuanto antes comience la medicación mejores son los resultados.
El proceso de producción de Tamiflu es complejo y puede requerir hasta ocho meses desde la obtención de las materias primas hasta el producto fina
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Jue Abr 30, 2009 6:11 pm
