Sabemos que la vida no es fácil, pero a veces me sorprende la cantidad de personas (sobre todo padres de familia) que no tienen ningún inconveniente en dejar un montón de problemas a los que se supone “más quieren”.
Si piensas que un seguro de vida o de gastos médicos solo te concierne a ti, si crees que las cosas se solucionarán porque “Dios así lo decide”, si crees que para eso (de lo que no has sido responsable) te ayudarán tus hijos, al cabo para eso los tuviste, por favor lee este post.
El dinero es, como he dicho, una herramienta. “Las penas con pan son menos” porque es más fácil hacer un librero con clavos y martillo que sin ellos. Pero no deja de sorpenderme la cantidad de personas que ya sea consciente o inconscientemente se desentienden de esta herramienta, porque cuentan ya sea con papás o con hijos que siempre les resuelven el problema.
Caso 1. Muere abuelita de familia. Sus hijos (los hijos de la abuelita) quienes en teoría deberían hacerse cargo de los gastos, no “podían” pagar ni el café. Y pongo entre comillas, porque vamos, no es ciencia dura el imaginar que si tus padres están viejitos y no cuentan con pensión o ingreso alguno, habrá que pagarles hospital, medicamentos y eventualmente, servicios funerarios (sobre todo si no les enseñaste con tiempo cómo podían ayudar ellos con eso). Los nietos desembolsaron una fuerte cantidad. Y los papás cómoda ( o incomodamente), se recargaron en sus hijos.
Caso 2. El hijo que no da una, y espera una y otra vez que los papás lo “rescaten” de cuantas situaciónes se mete. Un cuate que nomás no puede mantenerse solo, pero por supuesto, ya tuvo un hijo al cual no le da dinero porque “no tiene”. La mayoría de sus gastos (de los del baquetón y del hijo del baquetón) corren por cuenta de los papás (del baquetón).
Caso 3. Los papás que tienen su casa cuyas escrituras son un revoltijo, nada está bien y durante toda su vida no han hecho nada por arreglarlo. Esa es la herencia a sus hijos: arreglar y pagar por regularizar un predio que posiblemente no valga lo que se tenga que invertir en él.
Yo me pregunto ¿no se supone que cuando uno quiere a alguien hace lo posible por evitarle problemas?? y más si son problemas de UNO.
Es muy fácil refugiarse en el “es que nunca pude ahorrar” “es que es muy difícil hacer dinero”, “es que no sé como”. ¡pues nunca es tarde querido lector!! si tus hijos son chicos, si tus padres todavía están en buena salud y si tu estás leyendo esto, trabaja duro para no ser una carga para nadie. Pocas cosas tan tristes como la pérdida de un ser querido y además heredar su problemas y responsabilidades que nunca debieron correspondernos. ¿ No creen?
* Contrata un seguro de gastos médicos mayores. Si te enfermas ¿quién va a pagar la cuenta? tu espos@? tus hijos? tus padres? ¿quién?
* Contrata un seguro de vida. Para que puedas garantizar a tu pareja e hijos una estabilidad en lo que asimilan la pérdida.
* Contrata un plan para ahorrar para la educación de tus hijos. Eso de salirse a la mitad porque no hay dinero puede ser muy duro.
* Ahorra dinero para el que tiene necesidades especiales.
* Contrata un servicio funerario. Es mentira que te vayas a morir por contratar uno. Te vas a morir algún día, de eso no se salva nadie, pero no sucede porque contratas tu cajita.
* Dáte cuenta de que tus padres/pareja/ no podrán ayudarte toda la vida. Y al revés, lo más seguro es que llegue el momento en el que tu tengas que ayudarlos a ellos.
* Arregla tus papeles. No es tan difícil ni tan caro como crees. Uno tienen la idea de que aquello a lo que le teme es un mounstro gigante que si lo enfrentamos acabará con nosotros, y cuando por fin lo enfrentamos nos damos cuenta de que era muy fácil derrotarlo.
* Se ordenado y cumplido. Tanto con tus obligaciones como con las cosas en general.
* ¡Cuida tu salud!!
* Haz tu testamento
FUENTE: www.blogylana.com