www.dossierpolitico.com/vercomumnas.php?artid=46556&relacion=dossierpolitico&mas=292Este sábado, Andrés Manuel López Obrador hizo una de sus peores declaraciones de los últimos meses. Criticó al empresario Carlos Slim por la declaración que hizo a principios de esta semana, calificando de "impagables" las elevadas tasas de interés en tarjetas de crédito que cobran la mayoría de los bancos privados en México. AMLO dijo al respecto: "creo que se están dando cuenta del abuso que ha habido y están tratando de curarse en salud. Saben que la gente va a protestar y va a condenar todos estos abusos más temprano que tarde".
El señalamiento de AMLO no sólo es erróneo. También es limitado y obtuso. Demuestra, por lo menos en este caso, su escaso entendimiento del asunto, pues que diga que Slim lo único que hace es "curarse en salud", es, sin duda, un razonamiento pobre y desorientado, pues Slim presentó un argumento completo sobre el problema del incumplimiento de pagos de tarjetas de crédito, que se deriva de las elevadas tasas de interés, que Slim llegó a decir que son "impagables".
Con su declaración, el poderoso empresario de talla internacional se pone del lado de los deudores de la tarjeta y, al mismo tiempo, advierte, con la autoridad que le da ser banquero, que el problema de incumplimiento de pagos de incrementará si los bancos no bajan las tasas. Tal actitud cimbro al sistema bancario mexicano y lo veremos un poco más adelante.
AMLO se quedó atrás de Slim, ya que, además, señaló que el empresario mexicano declaró lo anterior porque "saben (sic) que la gente va a protestar y va a condenar estos abusos más temprano que tarde".
Es tan extraviada y de bajo nivel lo dicho por AMLO que resulta inexplicable como puede proclamarse líder político con esa clase de planteamientos.
El señor López Obrador debe informarse de que muchos deudores de tarjetas de crédito del país ya están protestando por la situación y, no sólo eso, sino que están dejando de pagar sus deudas debido a lo elevado de las tasas de interés. ¿No estará enterado el señor López Obrador?
Con su señalamiento, Slim hace un reconocimiento del problema, más no sólo eso. También acepta que tal como están las tasas de interés, la deuda es impagable.
López Obrador debió haber hecho un reconocimiento a Slim por haber hecho esa declaración que avala la decisión de muchos tarjetahabientes de no pagar sus deudas de tarjetas, no porque no quieran, sino porque no pueden.
AMLO asumió una actitud mezquina ante lo dicho por Slim, tal vez poque considere que hacerle un reconocimiento es darle credibilidad a un empresario. Si así fuera, lo que refleja es esa actitud persistente en AMLO de no reconocer en otros políticos o empresarios capacidad e ideas avanzadas o más adelantadas que las de él. Tal actitud fue uno de los factores que lo alejaron de muchos empresarios que querían apoyarlo pero que ante su cerrazón y ceguera prefirieron alejarse y buscar a Felipe Calderón.
Ante el problema de la creciente deuda, cada vez más impagable de las tarjetas de crédito, AMLO se quedó a tras de Slim.
López Obrador no ha tomado el tema en sus discursos ni en sus mítines políticos; no ha hecho una de sus causas la defensa de los usuarios de tarjetas de crédito que no pueden pagar, ni tampoco ha demandado que los bancos sean sancionados por haber entregado millones de tarjetas de crédito sin haber realizado un estudio de la capacidad de pago de los usuarios, lo que ha generado una ola de incumplimientos de pagos en el país, mismo que crecerá sin control mes tras mes.
Slim puede ser criticado por otras razones justificadas pero no por haber reconocido y advertido de un problema mayúsculo que amerita atención y solución.
En otra parte de su declaración, AMLO se refirió a lo dicho por Luis Pazos, el director de la Comisión de Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros, (CONDUSEF), de que poner topes a las tasas de interés de las tarjetas de crédito es inviable e inútil porque no funcionan.
AMLO dijo al respecto: "Luis Pazos es sólo Luis Pazos, muy pequeño, más panista que el PAN y ya es mucho hablar de él".
Los dicho por AMLO raya en lo ridículo, y probablemente refleje su incapacidad para debatir temas financieros, porque, en realidad, lo dicho por Pazos era una estupenda oportunidad de rebatir sus argumentos de forma categórica y ejemplar ante la opinión pública nacional y los millones de usuarios de tarjetas de crédito.
Sin embargo, AMLO mostró tanta pobreza de argumentos que quedó en el ridículo ante los banqueros y financieros pues se pudieron dar cuenta de que AMLO es un ignorante en asuntos financieros, por lo que no lo consideran una verdadero desafío.
Recordemos que durante la campaña electoral, AMLO no asistió a la reunión de consejeros nacionales de BBVA Bancomer a la que fue invitado al igual que Calderón y Roberto Madrazo., reunión a la que no asistió, perdiendo una magnífica oportunidad de convencerlos o de rebatirlos, demostrando capacidad. En esa ocasión perdió muchos puntos y dejó el campo de batalla a sus enemigos políticos.