Estimada Karime, este tema, como el anterior, son muy bastos así es que trataré de ser conciso.
Antes que otra cosa, acoto mis comentarios a mi experiencia personal, procurando ser respetuoso con otras ideas diferentes a las mías, este es un tema sensible.
Antes definiré, según yo, a la pareja: es la unión formal de un hombre y una mujer en convivencia y un propósito común.
Formar una pareja no necesariamente tiene que ver con el amor, puede hacerse por deseo, necesidad, obligación… o una mezcla de todo eso.
La función de la pareja es la de complementarse, es decir sumarse; la procreación no requiere de la pareja como tal.
Los conflictos suceden por muchas causas, pero creo que es la falta de comunicación y la poca disposición de las partes a buscar un acuerdo.
Me parece que una gran parte de los conflictos que suceden al inicio de la unión se deben a que idealizamos a la pareja, le atribuimos las virtudes que deseamos de ella y nos ocultamos sus defectos, muchas veces inconcientemente y otras mas suponiendo que no se corregirán en el futuro. Otra buen parte de los conflictos se debe a la lucha de poderes.
Supongo que respecto a los cambios actuales en las relaciones de pareja te refieres a como se dan en la actualidad respecto a las de generaciones anteriores. En ese supuesto y refiriéndome solo a las relaciones heterosexuales, se hace evidente que tienden a ser desechables y sin compromiso; esto no necesariamente significa que las parejas ideales “deban” durar toda la vida, la esencia de una relación duradera es el entendimiento y apoyo mutuo.
Determinar el rumbo de la pareja humana es complicado y en el caso de nuestro país no me extrañaría que tendiera a parecerse al modelo gringo.
Aclaro que entiendo a la pareja diferente al matrimonio, la primera existe sin el segundo y ese es otro cantar.
Saludos.