A pesar de que las autoridades federales y la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) anunciaron que no cerrarán los supermercados y que el abasto está garantizado, los mexicanos realizan las llamadas compras de pánico, que en algunos casos se adquieren por medio de tarjetas de crédito, hecho que podría aumentar el nivel de morosidad.
En entrevista con Crónica, Roberto Bello, director general de Estudios sobre el consumo de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), argumentó que las personas deberán de evitar las compras excesivas ya que no habrá corte de abasto en los supermercados. De lo contrario, advirtió, podría aumentar su deuda en tarjetas de crédito, lo cual impedirá que mejore su situación económica.
"La ANTAD comentó que no hay motivo para hacer compras de pánico que sobreendeuden a las familias. En el caso de las personas que realizaron compras excesivas en las tiendas, se les recomienda valorar de cuánto fue su deuda, y en la medida de lo posible realizar el pago total de la compra en el banco origen de su plástico", comentó.
Por el contrario, Raúl Feliz investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), argumentó que continuará en aumento la morosidad en tarjetas de crédito, pero que no será provocada por las compras de pánico que realicen las personas como desconfianza al poco abasto de las tiendas de autoservicio.
Asimismo, Alejandro Valenzuela, director general de Banorte, opinó que en el caso de que las personas realicen compras excesivas por medio de sus tarjetas de crédito, los bancos "debemos ser más proactivos y flexibles en el apoyo de pago de los usuarios, con el objetivo de evitar caer en morosidad".
La Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México (Canac-DF) coincidió con los especialistas económicos como Raúl Feliz, en que el hecho de que las personas hagan sus compras con tarjetas de crédito no será motivo por el cual la morosidad aumente.
En su último informe bimestral, la Asociación de Bancos de México (ABM) informó que el índice de morosidad en tarjetas de crédito en el 2008 aumentó a 9.5 por ciento, con respecto al cierre de 2007 cuando se registró en 6.9 por ciento.